EL CONTROL, UN ARMA ILUSORIA

EL CONTROL, UN ARMA ILUSORIA

Cuando miro atrás, veo correr el tiempo en cámara lenta. Observo que, no se como, estoy en ese momento allí mismo donde me encuentro. La vida muchas veces no es lo que esperas, no estás con la persona que soñabas, no tienes lo que habías proyectado, no has llegado hacer todo lo planeado. Muchas veces soñamos con situaciones de otros y no vivimos las propias, en sus tiempos y con todos sus defectos, porque hay algo que si debemos tener claro, la palabra perfección existe, solo, para comprender el significado. Nos programamos tanto, que si algo no sucede como se planificó colapsas, te estresas, te agobias y por ende el sufrimiento colma nuestra alma, un sufrimiento verdaderamente innecesario.

Y es tan simple comprender que todo lo extremadamente bueno y lo muy malo tiene que suceder para poder continuar. Necesitamos vivir cada evento, cada batalla, cada descuido, cada abandono, cada fracaso, simplemente para volver a mirar dentro de nosotros y saber que podemos continuar.

Y cuando sigo mirando atrás y veo mi relación, entiendo que estoy con el hombre que necesito tener en esta vida, porque él me da lo que aún no he asimilado, lo que aún me falta por aprender, porque todo lo que me encanta y me disgusta de él, está en mi, que es mi proyección, de lo que soy o deseo ser y puedes darte cuenta de todo esto si dejas de lado las culpas, el victimismo y de mirar al otro para ver donde está “su” error, cuando en realidad a donde debemos mirar es a nosotros mismos, a nuestro interior, a nuestro ser.

He sido por mucho tiempo una persona que ha sufrido mucho por querer tener el control de todo en la vida. Me ha costado soltar situaciones y aun hoy me ayudo a no caer en lo mismo. Se muy bien que no es fácil, pero cuando miras dentro de tí y logras escuchar tus verdaderas intenciones, comprendes que puedes y debes dejar que las cosas sucedan como tienen que ser. El camino es largo, cuando tenemos grandes bocanadas de control en nuestras vidas, costumbres que poco a poco irán cambiando por mas sonrisas a tus familiares, amigos, pareja y a ti misma frente al espejo. No hay nada mejor que sentir una gran paz interna, comparado con el hecho de querer ver «si todo salió como debería salir»

Ten en cuenta que al planear tanto, de alguna manera, también tienes la idea ilusoria de controlar tu futuro y como tendría que ser. Dejemos el control de lado, porque a decir verdad nada podemos controlar, las cosas se van a dar tarde o temprano y volverás a pasar por lo mismo, si aún no has superado la lección que la vida tiene para ti. Y volverás a caer con el  mismo tipo de personas, con la misma situación, con aquel mensaje repetitivo en bocas diversas. Es porque estás luchando contra algo que necesitas interiorizar, asimilar, comprender y superar, cuando llegues a este punto, llegarás a una nueva situación que necesitas en tu vida para seguir creciendo. La única manera es soltar, dejar ser, dejar el juicio, las culpas, los hubiera, el victimismo, las críticas, las manipulaciones tortuosas y comenzar a vivir tu presente, este preciso momento que estás leyendo estas lineas, este es el único momento real que puedes cambiar o no.

Planifica sin que esto te quite el sueño, vive el camino y disfrútalo al máximo, con absolutamente todo lo que tenga en él.

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